3.1. Introducción: espacio, abstracción, inmersión
Como hemos visto, el territorio de la instalación audiovisual busca la emancipación de los marcos cuadrados de las pantallas convencionales integrando el espacio arquitectónico como parte de la obra. Este hecho es, si cabe, más notorio en aquellas instalaciones que, aun siendo audiovisuales, dejan de lado la tecnología del video para centrarse en el recurso de la luz y el sonido, sin el apoyo de la imagen.
La naturaleza abstracta de la luz, así como sus efectos psicológicos, ofrece a los artistas un medio sugerente y evocador, más poético que conceptual, y les permite trabajar a fondo un universo de sensaciones y de juegos perceptivos.
En este contexto, la arquitectura juega un papel fundamental, pues ya no se trata solo de un soporte sobre el que se puede proyectar una imagen. La arquitectura se convierte en una parte inseparable de la obra y, como veremos, en muchos casos se trata del objeto en sí mismo de las obras. Es por ello que prestaremos atención a disciplinas cercanas al diseño arquitectónico, como la escenografía y sus innovaciones a lo largo de los siglos xx y xxi.
También veremos cómo, en muchos casos, y dada la naturaleza abstracta de la luz, el sonido se convierte en el «narrador» de las obras –el portador del significado–, y sirve de elemento estructurador, tanto por medio de técnicas de sincronía audiovisual, como de narración figurativa o de evocación emotiva. Es por ello que también pondremos el foco en los desarrollos de la investigación musical y sonora a lo largo de los siglos xx y xxi, pues pueden resultar reveladores a la hora de plantear trabajos vinculados con el formato de la instalación audiovisual.
Como veremos, en las instalaciones contemporáneas de luz y sonido es habitual usar la informática con el fin de orquestar los diferentes elementos sonoros, lumínicos o cinéticos de forma coherente. Estudiaremos artistas contemporáneos que usan virtuosamente estas nuevas técnicas, y ofreceremos una serie de recursos en línea que nos ayudarán a continuar expandiendo nuestro conocimiento con el fin de alcanzar las competencias necesarias para diseñar y ejecutar instalaciones audiovisuales de luz y sonido.